La ciudad parlante de Cabrera Infante

Tres tristes tigres es la novela que consagró al cubano Guillermo Cabrera Infante (1929-2005). La obtención del premio Biblioteca Breve en 1964 permitió a su autor dedicarse por completo a escribir.

La capital cubana es la protagonista indiscutida de la historia en Tres tristes tigres. Sobre todo La Habana nocturna, la de los cantantes eternos, la del Tropicana y todo ese mundillo efervescente inundado de personajes entrañables. Cuenta el autor en una entrevista, “lo que ocurrió fue que me di cuenta de que todo ese mundo de La Habana de noche, todo lo que se narra en Tres Tristes Tigres, iba a desaparecer a la corta o a la larga, y sin tener testigos, sin tener nadie que lo describiera. Era una realidad muy rica como para dejarla desaparecer de esa manera”.

Un texto plagado de continuas alusiones musicales. Sobre todo al son y a letras del cancionero popular cubano. Así como divertimentos literarios, parodias, malabares lingüísticos, la exaltación de la noche y la descripción inigualable de sus mitos. Un punto de vista con muchas libertades da ritmo a la prosa. Se destaca la creación de un personaje vital llamado La Estrella, una cantante de boleros descomunal. Cabrera Infante la delinea con maestría.

La celebración del erotismo nace en cada descripción de las mujeres admiradas por el protagonista de la novela. Un ejercicio convertido casi en veneración ya que las ninfas que pueblan cada uno de los libros del escritor cubano. Sin embargo, existe también un lugar para el humor digno de una comedia de enredos. Tres tristes tigresComo apunta el autor en una advertencia al comienzo “el libro está escrito en cubano”. Un cubano rico, luminoso, que sorprende. Cabrera Infante juega con las palabras, las hace cómplices en una prosa barroca y cadenciosa.

La novela está dividida en fragmentos breves en su mayoría. En cada uno fluye un matiz diferente. Nunca es la historia un estilo compacto. Es la escritura de GCI que se transforma, se despliega, adquiere un tono diferente, la camaleónica coraza abarcando el lenguaje en su esencia. Pero el mérito mayor sea quizás esa musicalidad presente en cada página, en cada diálogo ingenioso y en la intertextualidad concebida para multiplicar las reverberaciones del habla cubana. Surge así un caleidoscopio literario recreado en torno a la memoria. Cabrera Infante resalta los recuerdos como mecanismo para recuperar esa ciudad que ya no es. Es el mapa detallado de un momento único en una ciudad única. Deléitate lector en las páginas de Tres tristes tigres. Disfruta, goza, regodéate en las palabras. Toda La Habana transita en los pasajes de este libro señero en la obra de Guillermo Cabrera Infante. Porque como dice el narrador en un pasaje la única cosa por que se siente un odio mortal es el olvido.

Cabrera Infante dejó, además de esta novela, libros esenciales. Desde esa memoria minuciosa de la infancia titulada La Habana para un infante difunto hasta una miscelánea en viñetas sobre la historia cubana en Vista del amanecer en el trópico. Sus libros sobre cine Arcadia todas las noches y Un oficio del siglo XX son clásicos indispensables para entender el séptimo arte.

Andres Patteta Toledo

Periodista por el Instituto Grafotécnico. Realizó seminarios y cursos de perfeccionamiento en la UCA(Universidad Católica Argentina), UBA , Centro Cultural Rojas, Fundación Constantini. Colaboró en diferentes medios nacionales. También es profesor de Técnicas de expresión oral y escrita en el Centro Profesional Rómulo Raggio. Juriscentrum Abogados  

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